El titular del SATSAID, Carlos Arreceygor, advirtió cuando llegó a la sede de Cablevisión que "avizoramos que si hay una partición de la empresa seguramente vamos a tener inconvenientes laborales" y remarcó que "la postura que ha tomado el sindicato es pura y exclusivamente defender los puestos de trabajo".
"Vamos a estar al frente de la lucha y no vamos a permitir que se vaya ningún trabajador y que ninguna condición laboral cambie", aseguró el sindicalista.
El fuerte rechazo de los empleados a la intervención judicial se plasmó primero en una serie de asambleas de "autoconvocados", que se movilizaron primero por fuera de las estructuras gremiales. Esos empleados "autoconvocados" estuvieron en las reuniones que se hicieron en el Congreso con los diputados de los bloques opositores, donde pidieron que se "haga algo" para defender la integridad de la compañía y sus fuentes de trabajo.
Arreceygor, afirmó en dialogo con la prensa que el SATSAID “va a estar al frente de la lucha y no va a permitir que ningún trabajador pierda su lugar, ni que ninguna condición laboral cambie”.
El dirigente refrendó además lo publicado en el comunicado emitido por los trabajadores, diciendo que “se trata de una disputa entre grupos empresarios (en referencia a Clarín y al Grupo UNO) que se opusieron y se oponen a la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual”.
“Acá hay un interventor que, aparentemente, responde a los intereses del Grupo UNO, pero que seguramente junto con la justicia nos van a decir que no va a haber ningún problema con los puestos de trabajo”, afirmó.
El dirigente sostuvo que en caso de que se deba dar un “proceso de desinversión” en Cablevisión, que el mismo “se haga a través de la Ley de Medios”.
Arreceygor habló ante los manifestantes que se concentraron frente al edificio de la empresa, en el barrio porteño de Barracas.
Fuente: TelAm y Clarín
Solicitada del SATSAID, solo se publicó en los diarios Crónica y Tiempo Argentino
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Ello demuestra que esta cuestión es una disputa entre los dos grupos empresarios dominantes en el ámbito de los Servicios de Comunicación.
Ambas compañías tienen las mismas características en cuanto a sus prácticas políticas y empresariales depredatorias. Sin ir más lejos, ambos grupos se opusieron y se siguen oponiendo a la aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Asistimos entonces ante una pelea por la supremacía y hegemonía dentro de la Comunicación Audiovisual en la República Argentina.
En este combate quienes estamos en el medio somos los trabajadores y por supuesto, nuestras fuentes y condiciones de trabajo.
Estamos de acuerdo en que las empresas del medio deben cumplir la ley y, por sobre todo, la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, a la que apoyamos.
Esta medida tomada por el Juez Federal de Mendoza no es el camino.
Ello porque, principalmente, no se trata de la aplicación de los mecanismos de adecuación previstos por la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y, en segundo lugar, porque la medida rompe con todos los esquemas jurídicos, puesto que se pretende como medida cautelar, pero resuelve el fondo de la cuestión.
Los trabajadores creemos que esta medida judicial, pretendiendo encuadrar el conflicto en la Ley de Defensa de la Competencia, da lugar a una rapiña de mercado, y en consecuencia pone en peligro la permanencia de 10.000 puestos de trabajo y los derechos laborales de miles de compañeros, en lugar de iniciar un verdadero proceso de desconcentración que garantice la libertad de expresión, y en lo económico social, perspectivas serias de inversión y mantenimiento sustentable del empleo, como es el espíritu de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
El Sindicato Argentino de Televisión, Servicios Audiovisuales, Interactivos y de Datos (SATSAID) está de un solo lado: El de los trabajadores y defenderá por todos los medios gremiales, administrativos y judiciales que estén a su alcance, los puestos de trabajo y los derechos laborales hasta ahora obtenidos.
Los trabajadores defendemos y acompañamos en todos las etapas el proceso político abierto en nuestro país, desde el 2003 hasta el presente, y por eso, la defensa de los puestos de trabajo de nuestros representados, es un objetivo fundamental y primordial porque Sin trabajo no hay modelo.
